Shape of my heart (1993)
Música: Sting & Dominic Miller. Letra: Sting
Sting
Es posible que si alguien habla de Gordon Matthew Thomas Sumner deje a su interlocutor igual que estaba. Lo que ocurre es que ese señor, nacido en Wallsend (norte de Inglaterra) en 1951, hijo de un lechero y una peluquera, acudió a estudiar a Newcastle. Allí también jugaba al fútbol en el segundo equipo de la ciudad. Cuenta la leyenda que salió de un partido a un concierto tan rápidamente que no se cambió de camiseta, al parecer de rayas amarillas y negras lo que, dada su semejanza con una abeja, le valió entre sus compañeros el apodo de Sting (aguijón), y es así como le hemos conocido siempre.
Hay dos cosas que no se le pueden negar al bueno de Sting. Por un lado, su carácter polifacético en todos los sentidos. Ha dejado huella en artes muy diferentes (cine, música y otras). Incluso dentro de la música, ha compuesto e interpretado diferentes ritmos y tendencias. Está, por otro lado, su excelente calidad humana, siempre apoyando a organizaciones como Amnistía Internacional o creando el Rainforest Foundation Fund para proteger la Amazonia. De hecho, la especie de anfibio Dendropsophus stingi (endémico en Colombia) es un reconocimiento al músico por su “esfuerzo y compromiso para salvar la selva húmeda”. En la actualidad vive en Toscana practicando yoga y meditación, con posiciones muy cercanas al hinduismo y visitas a India, país que le ha fascinado durante bastantes años. Y en medio, poca cosa aparte de fundar y triunfar con Police, un montón de cine como actor, muchos discos en solitario y bandas sonoras de películas, aparte de once Grammys, un globo de oro, un Emmy y cuatro nominaciones a los óscar. ¡Total nada!
No cabe duda de que Sting debe gran parte de su fama (y de su fortuna) a Police y a sus cinco álbumes plagados de éxitos y con títulos tan curiosos como Outlandos d’Amour (1978); Reggatta de Blanc (1979); Zenyatta Mondatta (1980); Ghost in the Machine (1981) y Synchronicity (1983). Difícil encontrar gente de una cierta edad que no conozca múltiples canciones del grupo. Y, sin embargo, para mí lo más interesante llega en la época posterior cuando decide alejarse de posiciones comerciales y empieza a ser más intimista, investigador y autocrítico.
En 1993, publica el álbum Ten Summoner’s Tales (Diez cuentos del invocador) con, entre otras, la canción de hoy, Shape of my heart (Forma de mi corazón). Según él mismo, pretendía contar la historia de “un jugador de cartas, un apostador que no juega para ganar, sino para intentar descubrir algo; para descubrir algún tipo de lógica mística en la suerte o el azar; algún tipo de ley científica, casi religiosa”. Por su parte, el guitarrista Dominic Miller recuerda que “el riff de guitarra surgió de un ejercicio de calentamiento centrado en acordes de sexta, similar a la música de Chopin. Opté por evitar el tercer grado del acorde; pretendía que la secuencia de acordes se asemejara a la obra de John McLaughlin”.
El riff surgido de ese ejercicio gustó bastante a Sting, quien logró convencer a Miller para desarrollarlo más y más durante toda la mañana, Después, se fue a pasear escuchando la maqueta con sus auriculares. Sintió que la música contaba la historia de un apostador y regresó con una letra para acompañar la composición.
Sin más, la letra:
He deals the cards as a meditation
And those he plays never suspect
He doesn’t play for the money he wins
He don’t play for respect
He deals the cards to find the answer
The sacred geometry of chance
The hidden law of a probable outcome
The numbers lead a dance
I know that the spades are the swords of a soldier
I know that the clubs are weapons of war
I know that diamonds mean money for this art
But that’s not the shape of my heart
He may play the jack of diamonds
He may lay the queen of spades
He may conceal a king in his hand
While the memory of it fades
I know that the spades are the swords of a soldier
I know that the clubs are weapons of war
I know that diamonds mean money for this art
But that’s not the shape of my heart
That’s not the shape
The shape of my heart
If I told her that I loved you
You’d maybe think there’s something wrong
I’m not a man of too many faces
The mask I wear is one
But those who speak know nothing
And find out to their cost
Like those who curse their luck in too many places
And those who fear are lost
I know that the spades are the swords of a soldier
I know that the clubs are weapons of war
I know that diamonds mean money for this art
But that’s not the shape of my heart
That’s not the shape of my heart
That’s not the shape
The shape of my heart
En español:
Él reparte las cartas como una meditación
Y aquellos a quienes engaña nunca sospechan
Él no juega por el dinero que gana
Él no juega por respeto
Él reparte las cartas para encontrar la respuesta
La sagrada geometría del azar
La ley escondida del resultado posible
Los números lideran un baile
Sé que las espadas son las de un soldado
Sé que los bastos son armas de guerra
Sé que los diamantes significan dinero para este arte
Pero esa no es la forma de mi corazón
Puede que él juegue la Jota de diamantes
Puede que ponga la Reina de picas
Puede que oculte un Rey en su mano
Mientras el recuerdo de ello se desvanece
Sé que las espadas son las de un soldado
Sé que los bastos son armas de guerra
Sé que los diamantes significan dinero para este arte
Pero esa no es la forma de mi corazón
Ésa no es la forma, la forma de mi corazón
Si te dijera que te amé
Quizás pienses que hay algo mal
No soy un hombre de demasiadas caras
La máscara que uso es una
Pero aquellos que hablan no saben nada
Y se dan cuenta de su valor
Como aquellos que maldicen su suerte en demasiados lugares
Y aquellos que tienen miedo, están perdidos
Sé que las espadas son las de un soldado
Sé que los bastos son armas de guerra
Sé que los diamantes significan dinero para este arte
Pero esa no es la forma de mi corazón
Ésa no es la forma, la forma de mi corazón
Además del trabajo de Sting y Miller, es más que destacable la armónica de Larry Adler que sigue con una bella melodía la progresión de acordes de sexta. En cuanto a la letra, no son pocos los que han interpretado la historia del jugador como una metáfora de la propia vida del músico y de su relación con las mujeres que han formado parte importante de su vida. Él reconoce algo: “Tiene que haber cierta lógica. Es un jugador de póker, por lo que no le es fácil expresar sus emociones. Tiene una máscara y nunca cambia. Eso es bueno para él, pero es terrible para un amante”.
Da a entender que hay un propósito más allá del azar, de la ganancia material o del reconocimiento, algo que, verdaderamente, pueda llenar la vida del protagonista. El estribillo deja claro que, si bien las espadas son las armas del soldado, los bastos armas de guerra y los diamantes símbolos del dinero, ninguna de ellas representa la forma de su corazón, lo que implica una búsqueda de algo más auténtico y verdadero en la vida que trasciende a la lucha por el poder y la riqueza. Y es que es sabido que el amor y los sentimientos personales en general, incluso la propia identidad, son conceptos que no pueden sujetarse a las leyes de la lógica que puedan regir un juego de cartas ni reducirse a símbolos excesivamente simples. No es un hombre de muchas caras y advierte que quienes hablan no saben nada, sobre todo cuando lo hacen sin pensar antes. La comprensión y el razonamiento, al lado de la empatía son probablemente las armas más poderosas que tenemos para construir un mundo mejor y ahí queda la profunda meditación de Sting sobre la extraordinaria complejidad del ser humano.
La canción ha sido posteriormente versionada por gente como Sugababes, Craig David o Ann Margret, entre muchos otros. Al director Luc Besson debió gustarle lo suficiente como para incluirla en los créditos finales de la entrañable película León (El Profesional), con Jean Reno y una encantadora debutante Natalie Portman. El vídeo musical que acompaña a Shape of My Heart fue dirigido por Doug Nichol y se estrenó en septiembre de 1993. Se filmó en Sting’s Lake House en Wiltshire.
Puede verse aquí: