Diamante en bruto, que se estrena en cines el 18 de julio, es, ante todo, un retrato adolescente que, de puro realista, da como resultado una película sumamente divertida (en el más genuino sentido de la palabra «divertida»). Con una protagonista entregada por completo, que es todo un personaje, y que no deja nada —o casi nada— a la imaginación del espectador, este poderoso retrato adolescente sobre la obsesión por la fama, en esas edades terribles en que todo son anhelos y ganas de escapar, tuvo su premier mundial en la Sección Oficial del Festival de Cannes, única ópera prima en competir, y también participó en la Sección Oficial de la Seminci de Valladolid. Además, obtuvo dos nominaciones en los Premios César: mejor ópera prima y mejor actriz revelación para Malou Khebizi, y también inauguró la 4ª Muestra de Cine Francés «Francia está en pantalla», celebrada recientemente en Madrid.
Diamante en bruto está dirigida por Agathe Riedinger y protagonizada por la mencionada debutante y deslumbrante Malou Khebizi. El reparto lo completan Idir Azougli, Andréa Bescond, Ashley Romano y Alexis Manenti, entre otros.
Argumento
Liane, una joven de 19 años hipersexualizada, vive en un entorno de asfixia económica y moral con su madre y su hermana pequeña en Fréjus, pueblo situado en el sur de Francia. Obsesionada por la belleza y la necesidad de ser «alguien» y ante la falta de expectativas, ve en los realities la oportunidad de ser amada. Para lograrlo, está dispuesta a todo y no se rendirá ante los silencios de quienes le prometieron. El reality «La isla de los milagros» será su gran oportunidad.